Anécdotas y recuerdos de tu paso por Deusto
Un profesor, Diego López de Ipiña, nos enseñaba lo que el recién lanzado Nokia N95 era capaz de hacer, en mis ratos libre programé una app que usaba su acelerómetro para manejar videojuegos. Tuvo más de 300.000 descargas, e incluso Nokia me llevó a su sede en Helsinki. La liberé como software libre gracias a la ayuda del eGhost, un grupo de software libre de la universidad.
Recuerdo una universidad activa en la tecnología y abierta al emprendimiento, mientras cursaba la ingeniería tomé contacto con el grupo Ingenio, solían invitar a ponentes con trayectorias destacadas, y escucharles influyó para que me decidiera a ser el primero en estrenar el vivero de startups.
A partir de entonces recibí un gran apoyo de la universidad para posicionar la startup como referencia en innovación.