Todo comenzó cuando Álvaro le propuso esta aventura a la que no se pude negar, en apenas 7 meses consiguieron montar el equipo, patrocinadores necesarios y poner el coche a punto.
El 14 de Febrero de 2020 a las 7:00 a.m su compañero Ávaro y él se encontraban en un Peugeot 205 rojo lleno de pegatinas, con el coche a reventar de cosas que entregar en Marruecos, a punto de entrar en el ferry que cambiaria de continente y donde esta carrera de 10 días comenzaría.
En Marruecos conocieron muchos más estudiantes que al igual que ellos se habían animado a esta experiencia. Sin estos compañeros no hubiesen llegado a la meta.
No todo fue bonito, las duras etapas que recorrieron pasaron factura a la bestia roja (el coche), y tuvieron algunos problemas que solucionar, pero con trabajo en equipo y ayuda de la organización todo fue posible.
En el camino pudimos comprobar la pobreza de algunas zonas del país, su labor fue intentar ayudar a esas personas más necesitadas llevando material escolar, ropa, juguetes y 140 kg de comida (principalmente legumbres).
Por suerte pudieron regresar a sus casas sanos y salvos, y con muchas historias que contar, además de un carrete de fotos que plasma la aventura por Marruecos desde la gran bestia roja.